La muerte del diputado federal con licencia, Francisco Rojas San Román, precandidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI) a la presidencia municipal de Cuautitlán Izcalli conmocionó al Estado de México, por lo que sus compañeros de bancada-y de partido-, exigen el esclarecimiento del artero asesinato. Se espera en este sentido que el móvil no haya sido de carácter político, lo que sería realmente preocupante.
Al respecto, las entidades de interés público que participan en la contienda electoral 2018 deben hacer juntas un pronunciamiento para que las investigaciones se lleven a fondo y de esta manera se deslinden responsabilidades de lo contrario parecería que estamos viviendo acontecimientos graves como los de Guerrero y Michoacán, donde grupos con fuertes intereses se deshacen de gente que no comparte su forma de actuar.
La inseguridad se siga extendiendo por todo el país, en este sentido destacaban hasta hace un pocos años Guerrero, Michoacán, Morelos, Tamaulipas. Luego el crimen organizado avanzo hacia Chihuahua, Monterrey, Veracruz, etcétera, dejando una estela negra que en el concierto internacional nos hace ver muy mal. Por algo el bélico presidente del vecino país del norte, Donald Tromp ha estado declarando que México es un peligro.
Sin embargo, ningún candidato a la presidencia de la República ha abordado el tema de la inseguridad, y si lo ha hecho, no ha manifestado un plan convincente para abatir en verdad tanta inseguridad. A propósito del tema, un periodista haciendo un reportaje de los Maras Salvatrucha preguntó al máximo dirigente de la criminal organización que cómo podrían apasiguarse, regresar a la paz, a la tranquilidad, a lo que contestó: “Que el gobierno salvadoreño nos garantice trabajo y educación”. Este fenómeno, esta posición no son ajenos al caso mexicano.
Leave feedback about this