Va a estar interesante como dejarán las arcas las autoridades salientes que gestionaron en el período 2019-2021. Y es que antaño se caracterizaban por el saqueo total, inclusive se llevaban hasta los focos de las oficinas en aras de meter en problemas a los nuevos Presidentes Municipales y a su equipo de trabajo.
Si hasta antes del 2019 los políticos recurrían a esas prácticas que a la vez utilizaban para agenciarse dinero y darse una vida holgada, hoy no será tan fácil que gocen de privilegios, porque hay leyes que ya consideran los actos de corrupción como un delito muy grave: Es decir, los oscuros personajes tendrán que pasar una temporada en la cárcel, además de que deberán devolver lo robado.
Por ello, más les valiera a quienes fungen en la actualidad como alcaldes, para dejar cuentas claras y convincentes. Ya es tiempo de que haya respeto en ese sentido, que queden atrás esas viejas prácticas que resultaban toda una ofensa para los gobernados, principalmente para quienes menos tienen.
Seguramente los habrá ediles que en los últimos meses ya no pudieron cumplir sus compromisos por la retención de las partidas presupuestales, empero eso es otro cantar. Mediante la revisión de las cuentas públicas estatales o federales saldrá a relucir la verdad. Quien se encuentre en esta circunstancia no deben preocuparse.
Quienes sí pisarán la cárcel y estarán una buena temporada en chirona, serán quienes si quisieron pasarse de listos actuando a la vieja usanza confiados en que no pasará nada a pesar de haber dejado maquillados los ingresos y egresos. A este tipo de personajes se les debe aplicar todo el peso de la ley. Como dice el propio presidente Andrés Manuel López Obrador: “¡El pueblo se cansa de tanta pinche tranza!”.