Aritculo.-Que el antorchismo congregará 130 mil militantes en el Estado Azteca

*No precisan la fecha, para ver si pega la amenaza y logran soluciones con el gobierno de Eruviel Ávila Villegas

*Con recursos públicos se siguen fortaleciendo como un grupo de choque, creando todo un emporio    

A través de un panfleto, el Movimiento Antorchista anuncia una “concentración nacional contra injusticias del gobierno del Estado de México” en el Estadio Azteca; sin embargo, no precisa la fecha, lo que hace suponer que se trata de un ardid político para tratar de amedrentar a la administración de Eruviel Ávila Villegas, y de paso sacar una tajada millonaria vía presión, como acostumbra esa agrupación.

Dicen los antorchistas que congregarán allí a 130 mil militantes para “denunciar agresiones y violaciones a la ley”, amén de la falta de cumplimiento de compromisos contraídos con anterioridad, “muchos de ellos firmados públicamente y con presencia de un Notario”, relacionados con servicios públicos, vivienda, pavimentos, aulas, apoyo a la producción, programas de combate a la pobreza, etcétera.

Subrayan haber un cotejo, caso por caso de las demandas comprometidas, cuya copia ya fue enviada a la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México. Esta postura fue asumida al no tener éxito las movilizaciones realizadas por Antorcha en las principales calles y avenidas de la capital del territorio mexiquense: Toluca.

Los quejosos denuncian retención ilegal, de recursos públicos a los municipios gobernados por antorchistas: Chimalhuacán e Ixtapaluca, así como protección ilegal al monopolio del transporte, persecución y amedrentamiento como allanamiento de domicilios, intentos de homicidio y asesinatos con mensajes más que subliminales.

Por igual, no dejan de mostrar su temor porque sea puesta en libertad Guadalupe Buendía (a) La Loba, que por muchos años ostentó el poder  en el municipio de Chimalhuacán, y que fue hecha presa y sentenciada por ser autora intelectual del asesinato de diez personas, y de más de 100 gentes heridas en el año 2000.

Por igual destacan que mediante operaciones extralegales, enemigos del antorchismo han sido liberados; que se trata de la gente del grupo de La Hiena de Chimalhuacán, por lo que se puede reavivar la anarquía y enfrentamientos en la zona Oriente.

Afirman que ministeriales (representantes sociales) les siguen los pasos cuando hacen movilizaciones en Toluca para “fabricarles algún delito a los dirigentes”, en tanto otro grupo se encarga de arrojar cadáveres con letreros de amenaza a los dirigentes.

Inclusive, recientemente la antorchista Maricela Cerón, presidenta municipal de Ixtapaluca hizo la denuncia ante los medios masivos de comunicación, en el sentido de que su papá había sido secuestrado, catalogando este hecho como  “secuestro político”, para atemorizar a la agrupación.

Pudiera ser que en todo lo anterior, el movimiento antorchista tenga la razón, por lo que hace todo lo posible de ejercer presión mediante la movilización de militantes; no obstante, ellos y sus dirigentes son muy contradictorios y hasta más prepotentes que todos los gobiernos estatales o municipales; relegan demandas de ciudadanos que no son afines al antorchismo.

Utilizan a su antojo a los representantes de los medios de comunicación, a quienes solamente les ofrecen un desayuno. Cuando algún periodista les solicita publicidad para seguir circulando su sencillo medio, simplemente contestan que no tienen presupuesto, a pesar de contar en Toluca con unas oficinas exageradamente lujosas, donde tienen una cafetería del mismo porte; a pesar de que dicen concentrar los salarios de todos los funcionarios antorcistas, llámense regidores, alcaldes o diputados.

A los antorchistas no les importa si niegan publicidad a periodistas que por años les han estado publicando sus luchas, aunque gracias a las publicaciones hayan solucionado diversos problemas. Solo ellos tienen derecho a solicitar recursos económicos a las instituciones estatales o federales, y a manejarlos de manera discrecional para seguir siendo un grupo de choque, el brazo armado del Partido Revolucionario institucional (PRI), desde que surgió con la filosofía maoísta bajo el eslogan “el pueblo al poder”.