Los políticos, de manera cínica tomaron esa bandera para ganarse gratuitamente los espacios de los medios de comunicación
El 7 de junio, varios compañeros periodistas, y muchos políticos celebraron el Día de la Libertad de Expresión, que a la Mexicana, no es más que el festejo del trato que hiciera el gobierno de Gustavo Díaz Ordaz con los empresarios cuando éstos se declararon en apuros para seguir comprando papel. El gobierno federal de ese entonces “los salvó de la ruina”, y fue así como en nuestro país se instauró el 7 de junio como Día de la Libertad de Expresión.
Y en el contexto internacional, en 1991 se da la resolución “Fomento de la libertad de prensa en el mundo”, en Namibia. De ahí, la Conferencia General de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, Ciencia y Cultura (UNESCO), invitó al director de este organismo para que el 3 de mayo de ese año fuera reconocido dicho día, y así fue, por acuerdo del 20 de diciembre de 1993 de la Asamblea General de las Naciones Unidas. La idea principal fue: fomentar la libertad de prensa en el mundo al reconocer que una prensa libre, pluralista e independiente es un componente esencial de toda sociedad democrática.
En el estado de México, a principios de los años ochentas, el periodista, investigador, escritor y miembro de la Real Academia Española, el cubano Ernesto Vera propone al gremio periodístico la celebración del Día del Periodista Latinoamericano, planteamiento que fue apoyado por la entonces dirigencia del Sindicato Nacional de Trabajadores y Redactores de la Prensa.
Al respecto, el gobernador en turno del territorio mexiquense, Alfredo Del Mazo González (1981-1986) respalda la propuesta y en Sultepec se lleva a cabo el respectivo festejo, que no tuvo mucha duración pues el Sindicato aprovechó el foro para dar un mensaje contestatario, que no agradó a las autoridades estatales; razón por la cual quedó suspendida la participación de organizaciones gremiales.
Con el paso del tiempo, el foro de Sultepec fue cedido por el gobierno estatal a la Asociación de Periodistas del Valle de Toluca (APVT), por lo que uno de los dirigentes.- y fundador-, Felipe Pérez Avila propuso que para tener un festejo a doc, realmente conmemorativo, el 11 de abril fuera declarado Día del Periodista del Estado de México.
Fue a principios de 1994, cuando en Casa de Gobierno, en un convivio organizado y llevado a cabo por el recién electo gobernador de esta entidad federativa, Emilio Chuayffet Chemor, el entonces dirigente de la APVT, Raúl Marcelino Victoria planteó la idea antes mencionada al mandatario, quien vio la propuesta con mucho agrado; siempre identificado con el gremio periodístico, el gobernador giró instrucciones a su coordinador general de Comunicación Social del Gobierno del Estado de México, Jorge Herrera Valenzuela para tratar este asunto; que el festejo de los periodistas pasada del 7 de junio al 11 de abril, como Día del Periodista Mexiquense.
Empero, por su arrogancia con el gremio periodístico, Herrera Valenzuela duró muy poco en el cargo y todo parecía que se venía abajo, no obstante David López Gutiérrez, quien fue nombrado por Emilio Chuayffet coordinador general de Comunicación Social del Gobierno del Estado de México, retomó el asunto y en el mismo sexenio, en noviembre de 1994 se lleva a cabo el Primer Congreso Estatal de Periodistas del Estado de México, en el parque Naucalli de Naucalpan de Juárez, donde los conferencistas aprobamos por unanimidad que el 11 de abril fuera el Día del Periodista Mexiquense, en honor al segundo periódico insurgente surgido en 1812 en el municipio de Sultepec, bajo la dirección de José María Cos y Ramírez.
Así, el 11 de abril de 1995, en Sultepec comienza a celebrarse el Día del Periodista Mexiquense, y Día del Periodista Latinoamericano, para no entrar en fricciones con los compañeros que en un principio habían logrado el reconocimiento de la fecha propuesta por Ernesto Vera. Después de todo, el objetivo es el mismo, reconocer el rol de los representantes de los medios de comunicación, con un sustento histórico, e ¡independentista!.
El 7 de junio de 2012 acaba de transcurrir, algunos compañeros nostálgicos que no aceptan el 11 de abril, en el Valle de México plantearon al gobernador la realización de reformas al Código Penal del Estado de México para que se eliminen los delitos de injurias y difamación, por los cuales un periodista se ve inmerso de enfrentar un juicio por el libre ejercicio de su profesión. AL respecto, hubo una positiva del mandatario Eruviel Avila Villegas.
Algunos políticos, de manera oportunista, para ahorrarse el pago de espacios publicitarios enviaron a los medios de comunicación un cordial saludo y un reconocimiento por el 7 de junio Día de la “Libertad de Prensa”; y de paso se aventaron un choro para aparentar su buena voluntad de llevar excelentes relaciones con los sectores sociales, como lo es el gremio periodístico.
Los hubo políticos que se ofrecieron, si el voto les favorece, pugnar porque haya mejores condiciones, para lo cual se plantearon un proyecto de conocer las principales necesidades de los comunicadores, como fue el caso del aspirante a diputado local por el distrito II Toluca Norte de la alianza PRI-PVEM-PANAL, Héctor Hernández Silva, un hombre muy insensible con los periodistas, toda vez que cuando fue secretario general del Sindicato de Maestros al Servicio del Estado de México (SMSEM), se preocupó y ocupó por sacar de la lista del pago de inserciones a periódicos en general por la publicación de las actividades del Sindicato, cuando existe un presupuesto para tal efecto; política que en la actualidad sigue.