El ayuntamiento de Toluca llevó a cabo la reubicación de comerciantes
A unos cuantos meses de que concluya la administración municipal de Toluca, el periodo 2009-2012, las autoridades locales han decidido la reubicación de comerciantes de vía pública que se ganaban la vida honradamente en la zona Terminal-Mercado Juárez, al predio “Mi nuevo bazar”, ubicado en la avenida López Portillo. Por su parte, el Frente de Organizaciones Sociales (FAOS) invadió un predio al no ser tomados en cuenta por las autoridades. Al respecto, el investigador en el Colegio Mexiquense A.C., Carlos Garrocho Rangel, considera se debe replantear la medida, ya que cuando ocurre este tipo de medidas no se han aplicado los principios mercadotécnicos.
En conferencia de prensa, convocada en conocido centro social, por la Unidad de Comunicación Social del H. Ayuntamiento, la secretaria del mismo, Gabriela Gallardo Ortiz subrayó con dicha acción el gobierno municipal cumple su compromiso “de reordenar el comercio informal para fortalecer el desarrollo económico del municipio”.
La funcionaria subrayó que “Mi nuevo bazar, Las Torres” cuenta con una extensión de 2,500 metros cuadrados, donde se disponen de 261 espacios, los cuales están siendo ocupados por los comerciantes “que han expresado su disposición a regularizar su situación para ejercer la actividad comercial en el marco de la ley”.
Resaltó que mencionada reubicación se hizo cumplir la ley, “pero de una forma sensible y solidaria con quienes ejercen el comercio informal ofreciéndoles al mismo tiempo una alternativa para continuar su actividad”.
Y habló, la autoridad municipal también como objetivo recuperar espacios públicos, a efecto de favorecer el libre flujo de peatones y vehículos así como la seguridad y mejores condiciones de convivencia en la zona.
Al respecto, el director general de Desarrollo Económico y Regulación del Comercio, Eladio Molina Monroy, dijo que esta acción es resultado de más de dos meses de diálogo con representantes de las organizaciones de comerciantes, “pues la administración municipal 2009-2012, se ha caracterizado por dar atención a las necesidades de todos los sectores de la sociedad”.
Afirmó que los comerciantes reubicados tendrán un espacio adecuado y digno, pues el lugar cuenta con una plancha de concreto, servicios de agua potable, energía eléctrica y sanitarios, pero sobre todo, “se les da la oportunidad de pasar de la informalidad a la formalidad”.
En un comunicado, las autoridades municipales dan a conocer: que los giros de venta al menudeo son de ropa, calzado y algunas variedades de comida; las actividades desarrolladas se hacen en forma conjunta con el Gobierno del Estado; que participaron 500 elementos de seguridad, tanto estatales como municipales, dos Notarios, Ministerio Público y Policía Ministerial.
Añade que se trabaja con la Secretaría de Salud, a través de la Coordinación de Regulación Sanitaria, para prever que se cumpla con las condiciones higiénico sanitarias para quienes pasaran a la formalidad comercial; el terreno donde se han reubicado los comerciantes es propiedad del municipio, por lo que no tendrá para ellos ningún costo o gasto de mantenimiento. Y a nombre de los comerciantes, subrayan que cuando han sido retirados, sus ventas han ascendido 15 y 20 por ciento.
Al respecto, el investigador en el Colegio Mexiquense A.C., Carlos Garrocho Rangel, opinó por separado que la autoridad debe tratar de replantear espacios para el comercio informal, pues se trata de un sector surgido a causa de la falta de empleo, al igual que de la pobreza, donde 70 por ciento son mujeres.
Puntualiza que la mayoría de ellas son jefas de familia de quienes dependen sus hijos y, por lo tanto, no debe verse como un problema, sino como parte de la economía a la que debe dársele alternativas viables de desarrollo, agregó.
Aun cuando hay alternativas y estrategias al alcance del gobierno que no cuestan, el investigador consideró que no se han aplicado los principios mercadotécnicos para el comercio informal, por lo que “cualquier política contra el comercio informal, es una política contra jefas de familia pobres”.
“El comercio informal es una válvula de escape para la gente de menores ingresos que perdió su trabajo, y de no existir, las consecuencias pueden ser terribles”, abundó y mencionó que la simple reubicación no es la solución, además resulta un acto violento; que se trata de medidas temporales, cuando lo ideal es realizar una plaza piloto donde se consideren flujos de compradores potenciales que permitan sostener al comercio, como oficinas públicas o negocios ancla.
Asimismo, prosiguió debe demostrarse al comercio informal que organizado puede tener más o igual ganancia que si anda de un lado a otro en la calle, y subrayó debe aprovecharse la capacidad de atracción de ciertos negocios privados u oficinas de los tres niveles de gobierno, para tratar de ordenar espacialmente al comercio informal.
Y supuestamente por no ser tomados en cuenta, militantes del FAOS, acompañados por sus dirigentes, invadieron un predio en la vialidad Las Torres, al sur de la ciudad, para llamar la atención de la población.
Ojalá y los últimos datos sean fidedignos, pues en realidad, cuando hay reubicaciones un buen número de comerciantes se va a la quiebra, ello porque los lugares asignados no son los adecuados; es decir, las autoridades los reubican en zonas donde no están garantizadas las ventas: donde no se vean, para que no representen competencia al llamado comercio formal, propiedad de aquellos que tienen la posibilidad de pagar carísimas rentas.
Que los políticos ya no se vea a mencionado sector de la población como entes fáciles de manipular, principalmente en vísperas de elecciones y durante los comicios, para obtener votos y de esta manera ganar espacios en las esferas gubernamentales. La pasada administración municipal, panista, por cierto, ya había limpiado la zona; sin embargo, con la recuperación del poder, el PRI, los funcionarios volvieron a acepta la instalación de vendedores, o simplemente, por dinero, inspectores municipales permitieron se poblara la zona en conflicto.