El Partido Revolucionario Institucional (PRI), comienza a marcar distancia con quienes aspiran a ser la candidata o candidato de ese partido como abanderado a la contienda electoral por la gubernatura mexiquense en el 2018 y lo que parecía que encumbraría a la actual secretaria general del Comité Ejecutivo Nacional de ese instituto político, Carolina Monroy, con el evento de graduación de la Tercera Generación de la Escuela Nacional de Cuadros del Instituto de Capacitación de Desarrollo Político (ICADEP), quedando muy mal parada la madrina que vio vacios los espacios del presidium donde ningún priísta de renombre o de los propios aspirantes que hacen campaña desde hace meses en la entidad, la acompañaran en la entrega de documentos a los jóvenes que cursaron esa generación de cuadros partidistas.
El propio presidente nacional del PRI Enrique Ochoa Reza, al parecer ni se entero de dicho evento que en su tercera emisión, se realizo en el Estado de México, donde se supone que el partido tricolor tiene el mayor interés en que su instituto político lleven a su mejor aspirante a esa candidatura; dejando en el olvido a la secretaria general Carolina Monroy, quien por cierto no aporto mucho a los graduados, y los invitó a actuar decididamente para acabar con la improvisación y las malas prácticas para implantar una nueva pauta de acción ética y profesional; añadió que la generación de jóvenes priistas crece cada año en calidad, expectativas, opciones y compromiso social.
Por su parte el dirigente del PRI en la entidad Carlos Iriarte Mercado, solo apareció por unos minutos en esa clausura de cuadros políticos con la graduación de jóvenes priistas, y desapareció del auditorio del partido en Toluca, sin despedirse siquiera de la audiencia, ello dejo en claro que Carolina Monroy, pago cara su osadía de llevar esa clausura a la capital mexiquense, cuando los dos eventos anteriores se realizaron en el auditorio Plutarco Elías Calles, en la ciudad de México, y como pretendía ganar reflectores para demostrar fortaleza como posible aspirante, ahora se vio prácticamente marginada por las dirigencias nacional y estatal del tricolor.
Seguramente tanto el líder nacional priísta Enrique Ocho Reza, como el dirigente estatal Carlos Iriarte Mercado, se sintieron satisfechos de que las pretensiones de Carolina Monroy, no salieron a su antojo como lo penso con ese evento de graduación de cuadros de la Escuela Nacional de Cuadros del PRI; sin embargo esto podría acarrearles a los líderes del PRI, serios problemas sobre todo cuando la juventud se siente relegada por sus dirigentes y ante la necesidad de mantener la unidad partidista, esto también es un desaire a esas nuevas generaciones de mujeres y hombres que se forman en el Partido Revolucionario Institucional.
Así es que el golpe no solamente fue para la secretaria general, sino hacia el interior de su propio instituto político, que es muy notorio el que cometa ese tipo de errores, y los dirigentes dejen que cada líder haga lo que quiera, como en este caso de Carolina Monroy, y a la vez olviden que su fuerza política esta urgida de fortalecerse con las nuevas generaciones de militantes y no buscar desconocer las pretensiones de todos los líderes y militantes por aspirar a una candidatura.
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