Mosaico Mexiquense

MORENA deberá seleccionar bien a su candidato en Tlalnepantla.

El proceso electoral está destapado, en todos los partidos políticos hay buenas y malas noticias, unos están de acuerdos y otros incluso ya han desertado de los partidos que por años les dieron cabida y cargos públicos, pero que en este 2021 las cosas han cambiado por las “raras” alianzas entre derecha e izquierda que se realizaron con el único fin de sacar a MORENA de la “jugada”.

Pero en el caso de Tlalnepantla el tema es amplio, se tiene a un Presidente Municipal que no respeta acuerdos de antaño, cuando fue candidato a la presidencia municipal y en donde se supo que Arturo Ugalde le mandó a la maquinaria priísta para que ganará la elección, es más, que el propio Jonás Sandoval Orozco –panista- fue su coordinador de campaña y le invirtió recursos ya que habían hecho un pacto de “caballeros”, que al final Raciel ya no cumplió.

Y no lo cumplió porque desde diciembre, Jonás Sandoval renunció al cargo de Director del OPDM en Tlalnepantla, cuando se supo que había tenido diferencias con Raciel por la candidatura.

Ahora, el mismo Raciel en conferencia de prensa, despotrica en contra de quien le ayudó y apoyó, diciendo que utilizó documentos falsos para ingresar al Organismo de Agua, que no tenía o tiene experiencia, cuando se supone, porque así es la lógica que le estorba, ya que a Jonás se le posiciona en un lugar mejor que Raciel para la presidencia y candidatura, ahora resulta que no sabía.

Y si sabía, porque para eso hay que revisar documentación, pedir informes y se supone que lo hizo y dos años después, “disculpe usted me equivoqué”, cuando estamos en proceso electoral y lo que hay que hacer es desprestigiar y quitar del camino lo que estorba, eso es lo que Raciel está haciendo.

Sin duda un político que no tiene palabra, no tiene memoria y lo que no le funciona desaparece, ver lo que sucede al interior de la administración da pena, corrupción en la Comisaría de Seguridad con la pedida de moches y cuotas que ha quedado a relucir entre otras cosas más delicadas.

Esperemos que a Raciel no le salga el “tiro por la culata” o se quedé como “el perro de las dos tortas”, por su ambición de poder que lo tiene enfermo.