Informó que por lo menos se cuenta con un registro de por lo menos 20 extorsiones diarias por parte de los funcionarios municipales hacia los empresarios.
En este sentido, el Presidente de la AIEM, comentó que ya es insostenible que los servidores públicos de la administración municipal de Tlalnepantla pidan al sector privado diferentes requisitos para la entrega de licencias de funcionamiento, pero más aún cuando el trato es deplorable pues todo “depende del humor con que lleguen a sus labores diariamente”.
Afirmó Carmona Miñón, que las extorsiones hechas a los empresarios e industriales van desde la policía municipal hasta el más alto rango de los funcionarios, al olvidar que durante la administración de Enrique Peña se establecieron lineamientos en materia de apertura rápida de empresas, pero en Tlalnepantla eso no es suficiente, lo importante son los recursos que se puedan hacer llegar los funcionarios en sus oficinas.
Preocupado por tal situación expresó “porque los empresarios deben programar recursos económicos específicos como el pago de desayunos a los directores municipales que se encuentran relacionados con la entrega de permisos, y de esa forma, los dejen trabajar tranquilamente”.
Ante tal situación, el Presidente de la Asociación de Industriales en el Estado de México sostuvo que los presidentes municipales deben tomar en cuenta que la iniciativa privada atraviesa por un momento económico crítico, y no es tolerante que tengan que canalizar montos extras para las extorsiones de los funcionarios municipales.
Lo único que deseamos es invertir, crear empleos, pero tal parece que a la autoridad municipal eso no es lo importante, sino la entrada de dinero extra que ni siquiera va a parar a las arcas, sino a los bolsillos de funcionarios y de los alcaldes, en este caso de Arturo Ugalde Meneses.