Entre las tradiciones más importantes que prevalecen en nuestro país, es el Día de Muertos, donde lo religioso se une con lo prehispánico para realizar una celebración única.
Y en el Estado de México se vive con mucho fervor, gracias en buena parte a los grupos indígenas que viven en la entidad, quienes montan grandes ofrendas para recordar a sus ancestros.
Otomíes, náhuatls, mazahuas, tlahuicas, matlazincas y totonacas nos dan muestra de su grandeza cultural a través de estas manifestaciones para recordar a los que se nos adelantaron en el camino, pero también para honrar a la muerte.
Aunque este año la celebración se realizó como ningún otro año, pues los pueblos mágicos y con encanto del estado prepararon importantes actividades culturales que atrajeron a turistas de muchas partes.
Metepec, Valle de Bravo, Zinacantepec y Tepotzotlan, siempre han presentado grandes eventos, sin embargo este año tuvieron actividades de primer nivel.
Mientras que en Toluca se realizó por vez primera un festival cultural de día de muertos, esperando se convierta en uno de los más importantes de la entidad, como lo son ahora Quimera, en Metepec, y el de las Almas, en Valle de Bravo.
Libertad a Patishtan
En otro tema, de gran importancia para la aplicación de justicia de este país, después de 13 años, el profesor tzotzil Alberto Patishtán fue puesto en libertad, gracias a que el presidente Enrique Peña Nieto le concedió el indulto.
El maestro chiapaneco fue detenido en junio del 2000, luego de que fuera acusado de la muerte de policías estatales, en un proceso amañado, donde la voz de los testigos fue ignorada.
Patishtán nunca se dio por vencido y siempre luchó por comprobar su inocencia y en busca de su libertad carcelaria, sin embargo todavía en este año le volvieron a negar su libertad.
Sin embargo, el primer mandatario mexicano, tras las reformas al Código Penal Federal en materia de indulto aprobadas por el Congreso, decidió indultar a Alberto Patishtán Gómez, quien logró el apoyo de varias organizaciones sociales, incluyendo Amnistía Internacional.
Cabe destacar que esta figura del indulto ya funciona en el Estado de México, lo que aplicado de manera correcta es un gran avance para el país. Sin embargo todavía hay mucho camino que recorrer en materia de justicia en todo el país, pues mucha gente, como Patishtan, tiene que esperar muchos años, largos procesos judiciales, para poder obtener su libertad.
Pero también hay muchos casos en que eso no sucede, en que tiene que cumplir condenas por delitos que no cometieron, mientras que los verdaderos delincuentes se encuentran en la calle matando gente y la esperanza de los mexicanos en materia de seguridad.
Esperemos que este acto humanitario de Peña Nieto trascienda y se apliquen las leyes como deben ser, considerando a las clases desprotegidas, quienes tienen menos oportunidades que la gente adinerada.