Como parte de la Cruzada Nacional Contra el Hambre, para el Estado de México se programaron colocar 2 mil comedores comunitarios, a fin de que las familias de muy bajos recursos pudieran asegurar, al menos, dos de sus alimentos.
Asimismo, la entidad y un buen número de sus municipios, han sido beneficiados –por así decirlo- con programas para combatir, principalmente, la pobreza alimentaria.
El gobierno estatal y también los municipales han desarrollado proyectos para reforzar las acciones contra este problema, o al menos eso es lo que dicen las autoridades, pues de acuerdo a datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) la pobreza alimentaria en el Estado de México, por el contrario se ha agudizado.
Y es que dos de cada 10 niñas y niños mexiquenses sufren de pobreza alimentaria moderada o severa lo que les impide llevar una vida sana y adecuada; esta condición afecta al 17.7 por ciento de la población en la entidad.
El instituto dio a conocer que la población infantil en el estado creció hasta el 2014 a 5.5 millones de personas, de los cuales 2.7 millones son niñas, mientras que 2.8 millones son varones.
De igual forma ha crecido el grado de inseguridad alimentaria, ya que el 20 por ciento de la población infantil se encuentra en pobreza extrema; es decir, más de un millón 100 mil niños presentan un severo problema de acceso a la alimentación.
Pero este no es el único derecho vulnerado, pues a pesar de las prohibiciones, hay un alto grado de ocupación y empleo infantil, la mayoría sin ser remunerados o, en su caso, como máximo ganan dos salarios mínimos diarios. En la entidad 5.7% de las niñas y niños de 5 a 17 años realizan una actividad económica, es decir, forman parte de la población ocupada: 41.2% de estas personas no asiste a la escuela; 0.9 no tienen escolaridad; 28.5 y 56.2% cuentan con algún grado de primaria o secundaria, respectivamente, lo que pone de manifiesto la problemática del trabajo infantil en la entidad.
De forma general la mayoría de los niños realizan actividades de apoyo o actividades elementales, pues el 50.9% se encuentran en esta condición; mientras que el 29.7% se dedican a actividades comercio, principalmente informal; 10.0% son trabajadores en servicios personales y de vigilancia; y solo el 4.8 son artesanos.
Actualmente los niños entre los cinco y los nueve años de edad, constituyen el mayor número de personas por rango de edad en el Estado de México, siendo las personas de cero a 17 años el grueso de la población mexiquense, representada por el 33.2% de la población que habita en la entidad.