Es inaudito, que en estos tiempos existan diputados que aún no aprendan que la gente de su distrito les brindó la confianza para trabajar en bien de los mexicanos, pero la realidad es otra, deberán de rendir cuentas de su poco actuar, porque de algo si estamos seguros, este personaje cobra un muy buen sueldo, cobra gratificaciones, tiene un buen automóvil que le brinda la Cámara, le paga todos sus gustos, pero no trabaja, ocupa su curul para descansar.
A estos personajes oscuros y oportunistas deberían de descontarles las horas y los días que no trabajan, y así dejar en entredicho su actuar, debería el Congreso poner el ejemplo de su trabajo y a los malos como este “dormilón” no pagarles sus salarios.