No cabe duda de que el maneo irresponsable de las redes sociales, a través de Internet en un arma muy filosa que puede provocar psicosis colectiva, e inclusive afectar severamente a la economía de determinada localidad.
Desde la aparición de ese tipo de medio de comunicación, de fácil acceso al público usuario, se avizoraba nada bueno tendría la alta tecnología, porque, por un lado, contribuiría a la desaparición de prácticas responsables, como por ejemplo en el medio periodístico.
Antaño, antes de la aparición de la computadora los reporteros redactores y los gráficos trabajaban muy duro para llevar un excelente trabajo a sus redacciones, inclusive en este contexto llegaban a competir entre empresas afines.
Pero llegó la tecnología y con ello hubo muchos despidos en los rotativos. ¿Ya para qué contratar periodistas si todo mundo sube trabajos a Internet?, ¿si todo tipo de información se consigue en el moderno sistema.
De esa manera, comenzó a bajar la calidad en el contenido del material que hoy hoy se publica en los medios o se pasa al aire por medio de la Radio o la Televisión. Hoy los llamados comunicadores, egresados de las distintas universidades ya no tienen el espíritu investigador.
Lo más grave es que ya se haga uso de las redes sociales para desorientar a las masas, para hacerlas caer en la psicosis colectiva como ocurrió el 6 de septiembre en los municipios conurbados con el Distrito Federal, principalmente en Nezahualcóyotl donde supuestamente la fuerza pública estatal, municipal y el ejército estaban “masacrando a la población”, resultando todo falso. En este sentido, los legisladores deben de trabajar para establecer las normas para el correcto uso del Internet, y de las redes sociales.