El Congreso mexiquense le tomó el pelo a la ciudadanía y decidió postergar de manera indefinida la discusión sobre reformar la ley para garantizar los derechos de los homosexuales, entre ellos, la de poder contraer matrimonio.
La semana pasada, el presidente de la Junta de Coordinación Política de la 59 Legislatura del Estado de México, el diputado del PRI, Cruz Juvenal Roa, anunciaba que el martes 31 de mayo, en sesión extraordinaria, se discutiría el tema, incluso, señalaba muy seguro que había grandes posibilidades de que fueran aprobadas las iniciativas enviadas por el gobernador Eruviel Ávila Villegas, siguiendo el mismo camino del presidente Enrique Peña Nieto, quien de igual forma envió al Congreso de la Unión las propuestas para garantizar el derecho a matrimonio entre personas del mismo sexo, de adopción a parejas homosexuales, entre otras.
Esas falsas expectativas que dio Cruz Juvenal las realizó tras los foros que se organizaron en la UAEM para abordar el tema y donde se destacó la importancia de garantizar el derecho de todos; a la distancia, estos foros fueron sólo una simulación, en la que aclaramos nada tiene que ver la Autónoma mexiquense, la simulación viene de parte de los legisladores.
Y es que un día antes de la sesión, el Congreso local acordó sacar de la discusión el tema, pues los diputados de los partidos Revolucionario Institucional (PRI), Verde Ecologista de México (PVEM) y Morena solicitaron más tiempo para analizar la legalidad de la propuesta, lo cual suena más bien a prejuicios, pues como ya se había comentado en este medio, por muy buenas que sean las intenciones de apertura, tolerancia y respeto a los derechos de los homosexuales del presidente Peña Nieto, otra cosa muy diferente son el resto de los servidores públicos, en este caso los diputados del Estado de México.
Cabe hacer un paréntesis en cuanto a los diputados panistas, quienes de plano discrepan con la reformas.
Ante esta situación, grupos de homosexuales y defensores de los derechos humanos se han manifestado al respecto, incluso ha trascendido que hubo presiones de la jerarquía eclesiástica, y es que no está demás decir, que el gobierno estatal tiene una relación muy fuerte con el clero mexiquense.
Por su parte, el rector de la UAEM, Jorge Olvera reprochó la decisión de los diputados de posponer el debate de la ley de Matrimonios Igualitarios, al sostener que no existen fundamentos legales para negar este derecho a la comunidad gay.
Calificó esta actitud como un retroceso a la vida laica de la entidad y un freno a los derechos humanos.
Además recordó que existe jurisprudencia por parte de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, la cual debe acatar el Estado de México, aunado a que las conclusiones hechas en los foros universitarios y el Poder Legislativo, dijo son contundentes a favor del matrimonio entre personas del mismo sexo.
«Aquí se debe cumplir con el estado de derecho, la Suprema Corte de Justicia se manifestó en su momento y esto ya debe ser legalizado, ya debe ser una iniciativa de ley, esperemos que esto se pueda cumplir ya en fechas próximas» reprochó.
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