Jilotepec / México
El Presidente Municipal de Jilotepec, Rodolfo Noguez Barajas, encabezó la apertura de la Sala Inmersiva del Museo de Jilotepec, un espacio innovador que busca preservar yhonrar la memoria histórica del municipio a través de relatos y testimonios de sushabitantes.
Este proyecto único recopila las experiencias de tatarabuelos, bisabuelos y abuelos, y habitantes del municipio, quienes narran en video y audio sus vivencias sobre la vida cotidiana, el desarrollo de la infraestructura y los cambios sociales en Jilotepec. La iniciativa tiene como objetivo no solo conservar la historia, sino también capturar los gestos, las miradas y las voces de quienes han sido testigos del progreso del municipio, asegurando que sus relatos perduren en el tiempo.
La Sala Inmersiva ofrece una experiencia envolvente que transporta a los visitantes a las raíces de Jilotepec. La idea surgió como un esfuerzo por documentar las historias que suelen perderse con el paso del tiempo. Según el alcalde, “los relatos de quienes vivieron los grandes cambios de nuestro municipio son un tesoro invaluable. Queremos que las familias puedan venir y consultar estas memorias para siempre.”
La convocatoria para participar en el proyecto recibió una respuesta entusiasta de decenas de ciudadanos, especialmente personas mayores que compartieron sus
experiencias sobre la construcción de parques, escuelas y presas, así como aspectos de la vida social y cultural de antaño.
El primer video de la Sala Inmersiva está dedicado al desarrollo de la Escuela Anexa a la Normal, relatado por el Profesor Alberto Florencio Salazar Nieto, quien inició su carrera docente hace 47 años. En su testimonio, el profesor narra cómo comenzó a dar clases en una escuela con tres aulas sin sanitarios ni andadores, y cómo, a lo largo de los años, este pequeño espacio evolucionó hasta convertirse en una institución educativa con una infraestructura de primer nivel, que actualmente alberga 500 alumnos.
La escuela Normal inició con tres naves, ocho salones, un laboratorio, dos sanitarios, dos canchas de básquetbol o de usos múltiples y una plaza cívica, es un símbolo del esfuerzo y compromiso de la comunidad jilotepequense para brindar educación de calidad. La Sala Inmersiva del Museo de Jilotepec no solo resguarda el pasado, sino que también invita a reflexionar sobre la importancia de las historias que construyen la identidad, este espacio ofrece a las familias la oportunidad de conocer las raíces de su municipio y mantener viva la memoria colectiva.
El Presidente Municipal agradeció a las personas que han contribuido con sus testimonios, destacando que este esfuerzo está diseñado para trascender generaciones.
Se publicó también un video con fotografías de distintas etapas en el desarrollo del municipio, “este documental te hará cuestionar todo lo que creías saber sobre la vida
cotidiana de años atrás. Prepárate para un viaje impactante.” La Sala Inmersiva se encuentra abierta al público en el Museo de Jilotepec, donde los visitantes pueden disfrutar de los capítulos y sumergirse en un recorrido por la historia del municipio, relatada por quienes la vivieron. Este espacio promete ser un referente cultural y educativo para las generaciones presentes y futuras.

