Elementos de tránsito se manifiestan, y no conocen al regidor de la comisión de Seguridad Pública, Bernardo Sosa
Es necesario que el gobierno municipal de Tlalnepantla tome medidas drásticas sobre el actuar de los funcionarios públicos, es necesario que se tenga a funcionarios honestos, como lo ha expresado en su momento el titular del ejecutivo municipal.
Son muchas quejas las recibidas sobre funcionarios que no están haciendo bien su trabajo, son muchas las voces que se han alzado sobre lo que no hacen, sobre todo porque han cambiado su modo de atención a la ciudadanía.
Pero quizá eso ya no es nada, cuando los propios elementos de la corporación de Tránsito Municipal están en contra de sus propios titulares, en días pasados alzaron la voz, realizaron una manifestación por calles del municipio en donde expresaron su descontento por el trato inhumano que les dan, por la falta de equipo, por el bajo sueldo que tienen, por muchas cosas más que externaron.
Pero algo que nos llamó la atención, fue cuando preguntamos si habían recibido algún apoyo del primer regidor Bernardo Sosa quien tiene la comisión de Seguridad Pública, y lo lamentable es que ni siquiera lo conocen, y no saben que es lo que hace, que nunca se ha acercado a ellos para conocer de sus necesidades, en pocas palabras, es un integrante del Cabildo que solo se esmera por dos cosas, una por alzar el dedo, y la otra por cobrar sus jugosas quincenas.
Sin duda, que con estos antecedentes los elementos de la corporación están en desventaja, pues aunque las autoridades los hayan recibido en comisión, hayan firmado la minuta de las exigencias, les hayan escuchado, poco adelantarán en sus demandas.
Se supo que mientras ellos dialogaban con funcionarios de la administración, en la oficina de la Contraloría Municipal, el director de tránsito Ricardo Carmona les levantaba actas por abandono de trabajo, así entonces, para que dialogan, si por un lado los reciben y por otro “les dan atole con el dedo”.
Se espera saber en que acabará este episodio del gobierno municipal, en donde los propios funcionarios demandan a otros funcionarios, y aquí es en donde el presidente tiene que ocupar su “lógica” y sentido común, pensar con la cabeza fría y tomar decisiones que no empañen su gobierno confiable.
Por cierto, cerraron las puertas del Palacio Municipal, y afuera un policía –uniformado- de nombre A. Pacheco G. Subdirector de la Comisaría General de Seguridad Ciudadana, se identificó como periodista del medio “El Municipal”, abogado, etc, etc, “el mil usos”, pero con sobrada prepotencia quería que los medios abandonaran la plaza Gustavo Baz, esos son los funcionarios “honestos” de la administración municipal señor presidente?