Acarreados amenazados en Tlalnepantla
Las cosas se ponen muy difíciles en Tlalnepantla las elecciones están a la vuelta de la esquina y las autoridades se han dedicado a meter las manos en las campañas electorales de los diferentes candidatos que buscan obtener diversos puestos electorales dentro de este municipio.
Sabemos que la meta primordial es que el Partido Revolucionario Institucional no pierda el poder, que el tricolor no deje ninguno de los resquicios que dejan los diversos puestos de elección popular, sin embargo los rivales sacan lo mejor de sus herramientas para derrocar la dictadura Ugaldista que se cierne sobre este municipio.
Ugalde ha enfatizado de sobremanera su actuar en contra de los contrincantes primero de su hija Denisse y luego en apoyo total de su compañero de partido Pablo Basañez, además de que ha establecido muy claras las órdenes para que todos los funcionarios tengan la obligación de apoyar a los candidatos tricolores.
El Ayuntamiento municipal en los últimos días se ha visto vacio, sin trabajadores, sin servidores públicos que atiendan las demandas de los ciudadanos y esto gracias a que Ugalde ha dado la orden de que se deben movilizar todos los servidores públicos a los eventos masivos organizados por el PRI dentro de la entidad obviamente en calidad de acarreados.
Y si existe aquella voz razonable que se atreva a contradecir las indicaciones del edil paga con su empleo, ya que se pasa lista una vez que llegan los camiones al evento y quien falte obviamente se convierte en victima de las represarías laborales, esto debe ser dado a conocer a la voz pública, sin embargo el miedo y la necesidad se convierten los principales aliados de los Ugalde y de las autoridades vendidas a la causa priista.
Diariamente se ven camiones repletos de personas que salen de diversas oficinas pertenecientes al Ayuntamiento, y además que durante el camino se entregan playeras, banderas y demás souvenirs de los candidatos priistas, además de que se imparten clases breves y concisas de las labores que se deben realizar en el puesto de borregos acarreados…que conste que les dan una torta y un jugo para aguantar.
No cabe duda que estas acciones nos demuestran el retroceso que ha tenido esta noble ciudad y el error tan obsceno que cometimos los ciudadanos que en busca de un cambio votamos por un dictador y corrupto Arturo Ugalde.