Villa Victoria / Estado de México
La autoexploración es importante para detectar a tiempo el cáncer de mama, así lo manifestó la directora general de la Fundación Alma IAP Rina Gitler Weingarten y subrayó que “Tres minutos al mes te salvan la vida”, lo expresó al dictar la conferencia “El Brasier de Mamá” que organizó el DIF municipal, que encabeza Isis Gutiérrez Salmerón.
Ante niñas, jóvenes y madres de familia de diversas instituciones educativas, el presidente municipal Mario Santana Carbajal reconoció la labor de gestión del DIF para lograr que el voluntariado de la SEDESEM y la Fundación Alma IAP impartieran esta conferencia en Villa Victoria.
Agregó que el cáncer de mama es un tema que por su incidencia forma parte de la vida cotidiana: “está cerca de nosotros, ya no es algo lejano, por eso es importante informarnos, prevenir y tratar a tiempo”.
Ante la titular del DIF Isis Gutiérrez, el director de este organismo, Alfonso Munguía Flores y Regidores, el alcalde Santana Carbajal pidió a los asistentes abrazar este tipo de eventos con entusiasmo y pasión, pues están encaminados a aportar información útil para la familia, pues el cáncer de mama es un problema grave en el país y nadie está exento de sufrirlo, no sólo en su persona, sino con un familiar, amiga o vecina; por lo que se debe estar preparados.
A la par de la lectura del cuento “El brasier de mamá”, por la presidenta del Voluntariado de la Secretaría de Desarrollo Social del Estado de México (SEDESEM) María de la Luz Alcántara Fuentes, que respaldó esta actividad, la especialista indicó que en México cada dos minutos una mujer muere de cáncer de mama y una de cada ocho padecerá está enfermedad, que cada vez acomete a edades más tempranas y afecta también a los hombres, pues uno por ciento de los casos se presenta en este sector.
Acompañada por la coordinadora del Voluntariado de la SEDESEM Claudia Gómez, la especialista comentó que ante la gravedad de esta enfermedad, es vital que las mujeres conozcan su cuerpo, para que así puedan detectar de manera inmediata cualquier cambió anormal; para ello, las invitó a auto explorarse.
“Lo ideal sería que fuera una revisión diaria, pero con tres minutos al mes puedes salvar tu vida”, insistió Rina Gitler al explicar los tres pasos a seguir para la revisión de los senos y axilas: frente al espejo, en la regadera y recostadas en la cama, para detectar anomalías, como segregación de líquidos por el pezón, hundimientos o abultamientos extraños.
A las madres de familia, Gitler Weingarten les recordó que deben realizarse una mastografía por lo menos cada dos años y en caso de detectar algún problema, acudir a la clínica o centro de salud, que las canalizará con el oncólogo para que haga un diagnóstico adecuado y les indique el tratamiento a seguir.
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