La lucha por el empoderamiento de las mujeres en la vida política y social, fue clara propuesta de la diputada federal por el Estado de México, Carolina Monroy del Mazo, quién dijo “el Primer deber ético y personal de las mujeres en la política debe ser trabajar por las demás mujeres, hasta desmantelar totalmente el andamiaje social y cultural que ha sostenido la exclusión, la discriminación y la violencia que muchas siguen padeciendo”, durante su participación en la Mesa de Análisis sobre el Empoderamiento de las Mujeres en el Marco de la Agenda 2030 de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
“Hay una marcada exclusión de las mujeres en los gobiernos municipales en el Estado de México, ya que actualmente sólo el 9.2 por ciento de las demarcaciones municipales en el país son gobernados por las féminas.
Carolina Monroy del Mazo, dijo, que las mujeres mexicanas viven condiciones extraordinarias, por el avance en el reconocimiento de sus derechos consagrados en las leyes no acaban de asentarse en la vida cotidiana”; subrayo también, si bien la presencia femenina se ha incrementado en las cámaras y los gabinetes, debe insistirse en su participación cargos de gobierno.
La participación femenina en la política se gesta, en una cantidad de casos en la comunidad. “es ahí donde se origina y donde los liderazgos femeninos se descubren y se afianzan”; “abrir más espacios en todos los niveles, pero muy enfáticamente en la local, porque las transformaciones de fondo comienzan en la base, y el municipio es la base de nuestras organización política”.
Destacó la legisladora federal mexiquense, Carolina Monroy, que la determinación del presidente Enrique Peña Nieto de fortalecer los derechos políticos de las mujeres mediante la reforma constitucional que instauró la paridad electoral, permitirá que mientras más mujeres hagan política, legislen y participen en la toma de decisiones, la sociedad estará más cerca de la transformación de los roles y estereotipos y de la erradicación de los factores que alimentan la desigualdad de género.
Hay que reflexionar que en nuestro Estado de México, existen muchas mujeres que son el baluarte de la familia y han demostrado que en cualquier ámbito se pueden desempeñar, y que han tenido la fuerza y sapiencia para acompañar a los gobernantes y legisladores, pero su tiempo para llegar a ser parte principal de esos cargos está muy cerca para demostrar que ellas también pueden ser parte de esas representaciones de género y llevar a la entidad a nuevos horizontes de bienestar social para los mexiquenses.
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