ECATEPEC, Méx.- Mucho de qué hablar deja el actuar del aún Director de Comunicación Social de Ecatepec, Osvaldo Müller Meneses, cuando de todos es sabido la actitud de prepotencia con que se conduce ante los medios informativos, y no cumpliendo con la atención que se debe brindar a los directores y editores de periódicos.
Ahora, da muestras de burla hacia el presidente municipal Pablo Bedolla López al término del evento del Primer Informe de Gobierno, resulta que a un año de gobierno Osvaldo Müller Meneses hace ejemplo de que “los patos le tiran a las escopetas”, ver para creer.
Esperemos que después de los acontecimientos el primer mandatario municipal tome cartas en el asunto y decida su futuro político, ya que el aún Director de Comunicación Social ha dado muestras que el cargo le quedó grande.
Primero porque no sabe administrar su propia área, y después porque está echando al “caño” el trabajo del alcalde Bedolla López, en un año solo ha pagado facturas de publicidad a sus amigos y recomendados, y ha dejado en el camino a la gran mayoría de medios con quienes estableció oportunamente convenios publicitarios, nunca ha dado la cara, por el contrario siempre con esa actitud decide a quien atender los días martes y jueves en un horario de 11 de la mañana a una de la tarde, cosa nunca antes vista, porque se “supone” que los funcionarios están para atender oportunamente a sus proveedores y a la sociedad.
En el área de comunicación social, eso simplemente no sucede, inclusive al propio interior de su dependencia, existe inconformidad por el trato que les de este subordinado, que además se siente intocable.
Señor Presidente, en sus manos está el poner orden en esa oficina, recuerde que es su imagen pública y política la que está en juego, recuerde que por mucha amistad que tenga usted con los medios informativos y los editores, todo llega al límite y se rompe por lo más delgado, y eso, con el tiempo lo resentirá.
Osvaldo Müller sigue con la actitud de prepotencia y sentirse intocable, sigue sin atender las demandas de los medios y empolvando las facturas en sus oficinas, sin importarle los compromisos adquiridos, y sin importarle pagar los documentos de un trabajo que ya se realizó.
Hasta cuando Maestro Pablo Bedolla se dará Usted cuenta del daño que se está haciendo hacia su persona.
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